domingo, 30 de marzo de 2014

LA MÚSICA Y LA AFINACIÓN (I): LA PARTE HISTÓRICA DEL ASUNTO

Anoche estuve de charla con unos amigos, y uno de ellos -bueno, dos- me recordaron una anécdota que oí hace mucho tiempo... El robo de la música por parte de determinados colectivos. Al principio ni sabía de qué me hablaban, hasta que me dijeron lo de que la afinación natural es de 332 hz, y que cuando se decidió ponerla a 440 hz, nos habían "robado la música". Francamente, les dije que creía que esto estaba olvidado, pero me dijeron que no, que todavía se ve y se oye, así que quiero aportar mi granito de arena sobre esta tontería. Que conste que no soy la única (1), y que se pueden encontrar explicaciones probablemente más sintéticas que la mía.

1. Qué se dice... 

Hay diferentes webs que recogen esta teoría, pero en resumen es lo siguiente:
Goebbels crea un decreto universal en 1939 que obliga a fijar la afinación del LA en 440Hz. La idea detrás de esto era que esta afinación influye en las personas, creando desórdenes y malestar. La música se debía usar para incomodar, y para ello obligaban a afinar el LA en 440 hz, que es más pobre armónicamente, y además resulta desagradable al hombre, porque no es su frecuencia de resonancia, ni la de la tierra, ni coincide con la frecuencia del oro PHI ni nada.  Nos genera cansancio, inseguridad, miedo y angustia. Esta idea se aprobó en 1953 por el ISO (organización internacional de normalización), pese a que los músicos franceses protestaron, estando apoyados por el Conservatorio de París. Nos han robado la auténtica música, y estamos mal con nosotros mismos, la tierra y el universo cada vez que escuchamos música, porque la verdadera afinación, que sería a 432Hz unifica las propiedades de la luz, tiempo, materia, espacio, gravedad, magnetismo con la biología, ADN y conciencia. Al cambiar la afinación, los armónicos de la música no coinciden con los de la tierra ni con los del hombre.

Para más datos, dejo en el (1) varios enlaces de explicaciones, aunque todas ellas parecen iguales y no es difícil encontrar esta noticia por internet. 

Por último, un video resumen de todo esto, donde se puede oír música en 432 mientras se lee la historia:

No he querido extenderme en la explicación, porque, tanto si conocen como si no la teoría, no necesita mucha más aclaración. En cualquier caso,  creo que es mejor que consulte cualquier enlace de los que he aportado, que lo explican con más seguridad y convicción de lo que yo puedo aportar. Datos, poco más que lo que yo he expuesto

2.- ¿Qué dudas nos surgen? ¿Cuales son las preguntas que nos hacemos con esta noticia?

No sé los que me leen, pero a mi cuando alguien me cuenta algo, por norma general soy como una grabadora. A mi me dicen todo esto, y digo, "OK. Me ha quedado claro. Inarmonías, frecuencias, Goebles, ISO, oro PHI..." No tengo dudas, cuestiones etc. para el que me transmite la información. Supongo que todo lo que dice es cierto y se lo cree, y por lo tanto él ya lo habrá comprobado; o bien la fuente de información que tiene es absolutamente impecable.
Pero lo que hago en cuanto salgo del sitio es irme a mis libros y usar internet, para buscar datos que me aclaren lo que me acaban de decir. Tengo que revisar la exactitud de lo que me dicen. Para poder decir si esta idea es probable o improbable necesito tener conocimientos exactos de historia, física y matemáticas.

Dicho esto, la noticia se puede resumir en dos premisas:


  • Los nazis, en un intento de dominación mundial  -o algo así- cambiaron la afinación del LA=440hZ emitiendo un decreto universal, y saltándose la anterior afinación en 432Hz, que era la buena.
  • La afinación en 440Hz es dañina para el hombre, y  la afinación que mejor nos viene es a 432Hz. Nos provoca desajustes, ansiedad, miedo, y nos impide sicronizarnos con el tiempo, espacio, la tierra...
A la hora de analizar todo esto, hay que abordar ambas cosas por separado, porque el hecho de que una sea falsa no invalida a la otra, y viceversa. Es decir, puede ser que los nazis no hicieran nada, pero que hubiera un cambio de afinación por otro colectivo. Y puede ser que la afinación resultante sea mala. Así que esta primera parte se va a centrar en la historia, los datos que tenemos sobre este tema, y qué hay de cierto en las afirmaciones con respecto a los nazis, la afinación histórica etc.

3. Analizando las afirmaciones... ¿Qué es eso del sonido y hercios? ¿Qué relación tiene con la afinación?

Antes de abordar la historia, conviene tener claros un par de conceptos: los hercios y la afinación. Además, nos servirá para la segunda parte.

La música se basa en sonidos que ordenamos (3). El sonido son vibraciones que se transmiten a través de diversos medios elásticos, y que también influyen en el mismo. Esta definición es un poco de andar por casa -más datos en la wikipedia, o cualquier web de física que guarde relación con la acústica-, pero sirve para entender que estamos ante movimiento o vibración, y que necesita un medio para transmitirse. En el vacío no hay sonido.
Estas vibraciones u ondas se miden en hercios. El hercio cuenta el nº de vibraciones por segundo, o las veces que se repite la misma onda. Así, cuando decimos que el LA tiene 440hz, estamos diciendo que esa cuerda, independientemente del grosor etc, ha vibrado -esto es, ha repetido un movimiento igual- 440 veces en un segundo. Importante, para saber qué medimos, y cual es el criterio. Esto no se usará de forma oficial hasta 1970; y reemplazó al sistema anterior que hablaba de ciclos por segundo o cps.



Video que muestra a cámara lenta cómo vibra una cuerda de violín al ser frotada con el arco:

4. ¿Qué es exactamente afinar?

Para entender lo que es afinar, primero tenemos que entender que el sonido tiene una serie de características que lo definen, que son las siguientes:

Altura: Si el sonido es agudo o grave. Hay sonidos que nosotros no percibimos, pero los perros sí... Es decir, no somos capaces de percibir todos los sonidos, importante. Sólo oímos los que están dentro de 20 y 20.000Hz. Si quiere saber qué oye, en la próxima revisión médica, mire los resultados de la audiometría... Verá que no oye igual por un oído que por otro (probablemente, claro), y que es muy posible que no llegue a los 20.000Hz. Esto es porque no somos iguales, y cada persona tiene el oído como puede. Esto es lo importante para la afinación. Si sabe algo de música, sabrá que hay 7 notas que se repiten cada vez más alto.

Duración: Si ha sido largo o corto. Vamos, si dura un segundo o 10 segundos. Esto es importante para leer una partitura, junto con la altura del sonido.

Intensidad: Si nos estamos quedando sordos en la discoteca, o tenemos que acercar la oreja al altavoz. Esto se mide en decibelios y es lo que manejan los músicos que saben un poquito; no tocan todo igual. (4)

Timbre: Es lo que nos ayuda a distinguir el tubo de escape de un coche de un bombardino, por poner un ejemplo rápido y divertido. O, siendo más seria, lo que hace que distingamos que la voz es la de mi madre, y no la del vecino del quinto, aunque no vea a la persona. Ambas pueden emitir el mismo sonido, es decir, la misma frecuencia en hercios, pero sabemos que una es mi madre y el otro el vecino del quinto... Lo mismo pasa con un violín de 30 euros y uno de 3.000... Enseguida nos damos cuenta de que hay algo que es diferente. Aquí tiene importancia los armónicos, que ya veremos qué son. Esto es importante para los músicos profesionales, que ya suelen ser exigente con el instrumento que compran... Y con la segunda parte del post.

Importante: En música se suele añadir alguna otra característica, como articulación del sonido (si empezamos fuerte y dejamos que muera, o empezamos suave y vamos aumentando el sonido etc), pero no tiene relevancia para lo que hablamos.


4. ¿Qué es afinar?¿Cual es la historia de la afinación?

Si hemos leído con atención, vemos que la clave de la afinación es la altura del sonido. Nosotros elegimos un sonido -una frecuencia en hercios, o nº de vibraciones por segundo- y le damos el nombre de una nota. Luego las otras siguen en proporción a esa frecuencia... (ver segunda parte para más datos). Pero... ¿cómo se ha afinado a lo largo de la historia? ¿Antes se medía en ciclos por segundo todo? ¿Cómo se afina, y cómo se ha afinado?

1. Origen de las notas y primeras afinaciones en la historia (s. V a. C.-XVII d. C.):
Antiguamente no se sabía nada de lo que es un hercio, ni ondas, ni lo que el hombre oye y deja de oír... Pero se afinaba. Pitágoras, enredando con un monocordio -o, para entendernos, una especie de violín de caja rectangular con una sola cuerda- se puso a mirar qué pasaba cuando se pulsaba una cuerda, y las proporciones y equivalencias de los sonidos. Así, definió las notas musicales, y la forma de afinar. Cuando oían algo cercano a una frecuencia x, lo llamaban LA. Y luego numéricamente salían el resto de las notas siguiendo una proporción. ¿Por qué digo cercano? Porque se establecía la nota en función de la longitud de cuerda, grosor y tensión, y no a través de una medición de la onda sonora con un aparato. Es decir, no era preciso; nadie pudo dar una definición exacta hasta mucho más tarde, lo mismo que pasa con cualquier medida, ya sean metros, decibelios o segundos. Y, como en cualquiera de los casos que he citado, esta definición es por un consenso de la comunidad. Y si no, mira lo que pasa con las yardas y los metros en longitud; o kilos y onzas en peso... El sistema es el que se elige por consenso (5).

Pero estamos en una época en la que no hay consensos  y las medidas se hacen a "ojímetro". ¿Qué pasa? Mientras toques tu solo, lo único que tienes que hacer es mantener las proporciones de Pitágoras -ya superadas hoy día por otros sistemas (6) que corrigen los errores que tenían- en la afinación de las cuerdas. Esto no es difícil, porque Pitágoras buscaba sonidos que fueran armónicos, o que tocados a la vez sonasen bien. El problema viene cuando voy a tocar con otro instrumento, pongamos una flauta, o por ser más clara, un órgano. Para ver si tocamos lo mismo, nos ponemos de acuerdo en tocar la misma nota a la vez, un LA. El timbre es distinto, pero la nota tiene que sonar igual... y no lo hace. Uno de los dos tiene que corregir. Ya digo de antemano que el organista no se va a poner a golpear y cortar los tubos del órgano para ajustarse al violín; así que seré yo quien, con las clavijas, ajuste mi LA al LA del órgano. Y luego con ese LA, saco las otras tres cuerdas por proporción. La flauta puede corregirlo también, es una cuestión de proporción de agujeros y longitudes, aunque tampoco se pueden esperar milagros y variará según modelos. Por cierto, dicha proporción nos permite saber aproximadamente dónde situaban ellos el LA en la afinación...

Entonces, si somos un poco espabilados, nos daremos cuenta que el LA va a estar en donde marque el órgano, clavicordio, piano... que son los instrumentos que cuesta afinar. Y si no tenemos un aparato que nos mida las frecuencias, el LA puede estar, aproximadamente entre unas frecuencias... aleatorias, o donde lo pillaban más o menos; que es lo que pasaba antiguamente.

¿Y si tocan violines solos, como pasa en muchas piezas? Bien, ahí queda a nuestro criterio dónde ponemos el LA. Antiguamente solía estar más bajo porque las cuerdas no eran de nylon pretensado (un material sintético que resiste mucho, usado hoy día) y/o metal  sino de tripas de animales. Si se tensaban mucho, se rompían con facilidad. Y a ningún músico le gusta que le pase eso... Así que si estoy sola o con más violines, y tengo estos líos de cuerdas delicadas, afino un poco más bajo, para quitar tensión a la cuerda. Así me aseguro parcialmente contra roturas e inconvenientes.
¿Y si cantamos gregoriano? Obviamente, el que mejor cante marcará la nota de partida, y los demás a seguir. Eso, o coger el LA del órgano.
En cualquier caso, no todos los músicos tienen buen oído, y hacía falta establecer alguna referencia para el LA cuando se tocaba en grupo. No se podía estar pendiente de que alguien dijera qué era el LA, o de discusiones...

2. Primeras mediciones del sonido e intentos de establecer un LA (s. XVII-XVIII):

Como hemos podido ver, la afinación era relativa, y se elegía como referencia un instrumento que no se podía afinar con facilidad en caso de tocar con él, y si no, simplemente se hacía "de oído" por aproximación.
Habrá que esperar a Marin Mersenne para encontrar medidas del sonido, allá por el 1.637, cuando establece en su libro Principios de la armonía universal, cuales son los factores que intervienen en la vibración de las cuerdas. Mersenne, considerado el padre de la acústica, dijo que la frecuencia de oscilación es:


  • Inversamente proporcional a la longitud de la cuerda (que ya había dicho Pitágoras).
  • Proporcional a la raíz cuadradada de la tensión de la cuerda (cosa que se intuía, o no hubiera tenido sentido tener clavijas para tensar y destentar cuerdas)
  • Inversamente proporcional a la raíz cuadrada de la masa por unidad de longitud.

Lo importante de esto es que es el momento en el que empieza a haber un interés en saber cómo afinar, que no se limita al oído, sino que busca explicar y comprender cómo afinar con precisión, y cuales son las cuestiones que hay que tener en cuenta.
Marin Mersenne:

Por esta misma época tenemos también a Michael Praetorius preocupado de la afinación, aludiendo a los problemas de cantantes desgañitados y rotura de cuerdas que ya he comentado, y sugiriendo una afinación algo más baja. Por los datos que hay y sus descripciones, se puede calcular que en su época y su región, se afinaba unas tres notas por encima de la actual. Es decir, que lo que nosotros llamamos LA para ellos era un FA.

Pero habrá que esperar a 1.711, cuando John Shore inventó el diapasón. Es una doble barra metálica, que nos da la nota LA -o la que se use para afinar. Aquí ya tenemos una referencia clara de lo que se considera LA. Y descubrimos que LA puede tener tantos significados como casas haya en un sitio... Tenemos diapasones de distintos momentos históricos y países, que nos dicen que el LA estaba entre 380 y 480Hz. Aunque podemos fijar el LA en una frecuencia concreta, seguimos sin tener consenso en dónde fijarlo...
Pero... ¿Qué significa este baile de cifras exactamente? ¿Es realmente relevante? Esto se entiende si vemos las frecuencias de las notas de al lado, SOL por abajo y SI por arriba. Redondeo las cifras con decimales de las frecuencias por no andar liando los datos:

SOL: 392Hz
LA: 440Hz                     ¿LA entre 380 y 480Hz?
SI:494Hz

O sea, que lo que en un sitio se llamaba LA en otro sitio podía ser cualquier nota, bien por arriba o por abajo. Y de esto conservamos los llamados diapasones como prueba. No parece muy prometedor con respecto a lo que nos han contado sobre la afinación... Desde Pitágoras hasta el siglo XVIII parece que se afinaba según soplara el viento, y que cada persona hacía lo que le daba la gana. Además, tampoco se puede generalizar que la afinación fuera más baja, puesto que dependía de los gustos del lugar y del estado del órgano...

3. Afinación en la actualidad (s. XIX-XXI):

Pero... llegamos al siglo XIX, y alguien descubre que haciendo cuerdas de violín de acero y otros materiales, se rompen menos. Y las orquestas en esta época son el no va más del espectáculo, y hay que llenar salas... para lo que empiezan a subir la afinación... Si recordamos, el oído humano percibe entre 20 y 20.000Hz. Como que parece lógico subir, porque si bajamos, nos acercamos al límite de nuestro oído. Vamos, creo que hay más frecuencias agudas que graves para jugar. Y eso fue lo que pasó. Se subió la afinación en general, porque daba a la música más "brillo". Así, cada orquesta tenía su diapasón para afinarse, según su criterio... pero...
... ¿qué hacemos con la voz humana? La voz no tiene clavijas, ni tubos ni nada. No se afina; el cantante oye un sonido, y lo copia. Y si me lo suben mucho... pues no llego. Mi instrumento no da más, y no voy a gritar. Así que, al cambiar el LA y subirlo, había cantantes que no podían con lo que les tocaba. Y lógicamente protestaron. Hubo bastantes peleas con esto... Se imponía ya una cierta normalización.

Por otra parte, tenemos a Johann Scheibler, que en 1830 dará la medición de ciclos por segundo a las ondas, e inventará el tonómetro, que permitía ya una medición bastante acertada del sonido.

A partir de aquí habrá diferentes propuestas de afinación. Por ejemplo, en Francia en 1859 estableció por decreto que el LA fuera a 435Hz. Otra propuesta fue la afinación filosófica, basada en las matemáticas. Fijaba el DO como potencia de 2 a la 8, y al final quedaba el LA a 435Hz.
También los ingleses hicieron algunas intentonas, como fijar la afinación antigua en 453Hz y la nueva afinación en 439Hz. Esto sólo se aplicó en Londres, y el resto del país seguía afinando en 453Hz...
Pero de aquí se hizo una conferencia, la Conferencia de Stuttgart de 1834 que recomendaba afinar a 440Hz.
Como vemos, cada país intentó definir una frecuencia de afinación en el siglo XIX.

Ya en 1936 la Asociación Americana de Standares (ANSI), recomendó que se afinase el la a 440Hz. Y en la Conferencia Internacional de Mayo en Londres de 1939 se siguió con esa idea. Y en el 1955 la Asociación internacional hizo lo mismo, y lo reafirmó en el 1975. Cito literalmente la wikipedia, porque es breve, está bien explicado, y termina el recorrido histórico de lo que ha sido la afinación:

"En 1939 una conferencia internacional recomendó que el la encima del do central se afinara a 440 Hz. El estándar fue aceptado por la Organización Internacional de Estandarización en 1955 (y fue reafirmado por ellos en 1975) como ISO 16. La diferencia entre esta afinación y el “diapasón normal” se debió a la confusión acerca de cuál era la temperatura a la que se debía medir el estándar francés. El estándar inicial era la 439 Hz, pero fue reemplazado por el la 440 Hz después de registrarse quejas acerca de la dificultad de reproducir los 439 Hz en laboratorio debido a que 439 es un número primo.
A pesar de esta confusión, el la 440 Hz ahora se utiliza prácticamente en todo el mundo, por lo menos en teoría. En la práctica, las orquestas afinan con el la que genera el oboísta principal, en vez de hacerlo con algún dispositivo electrónico (lo cual sería más fiable), y el oboísta mismo no utiliza tal dispositivo para afinar su instrumento en primer lugar, así que todavía puede haber una ligera diferencia en la afinación exacta utilizada. Los instrumentos solistas como el piano (con quien afina la orquesta cuando tienen que tocar juntos) a veces tampoco están afinados con el la 440 Hz. De todos modos se cree que desde mediados del siglo XX ha existido una ligerísima tendencia a subir la afinación estándar, aunque ha sido casi imperceptible"

Se quedó establecido como afinación, aunque he de decir que luego la gente lo respeta o no. Por ejemplo, a mi me gusta afinar a 442Hz (afinación que usan en la Filarmónica de Nueva York y Boston, por cierto), porque si se me va desafinando el instrumento -es decir, se van destentando las cuerdas- me suele durar todo el concierto si apenas necesidad de tocarlo. Aunque he estado con músicos que eran maniáticos, ponían el afinador, y había que afinar a 440Hz sí o sí. He visto de todo, y en realidad, la gente hace lo que le da la gana. Y no se debe perder de vista que puedo ir a un bar a tocar, que tengan piano, y entonces tener que afinarme con el piano. No suelen llamar al afinador por mí...

EN RESUMEN: Históricamente se ha afinado como se ha querido, y hubo intentos de unificar la afinación ya desde el siglo XIX, para evitar problemas a otros músicos como violinistas y cantantes. La cuestión se decidió a lo largo del siglo XX, cuando las instituciones inglesas, francesas y americanas primero, e internacionales después, decidieron fijar el LA en una frecuencia. La decisión fue algo compleja por cuestiones matemáticas, pero se acordó que LA=440Hz, aunque a la hora de la verdad, la gente hace lo que le da la gana, y se ajusta a lo que tenga que afrontar.

5. Conclusiones hasta ahora:

Todo esto está tratado en algunas webs que he citado a lo largo de la entrada, como (1) y ésta en concreto. Como hemos podido ver, no hay nazis en la historia de la afinación. Con el recorrido histórico que he hecho, algunas cuestiones ya caen solas:

  • Los nazis no pintan nada. Ninguno de ellos parece haber tenido participación de ningún tipo en los estándares de afinación, ni directa ni indirectamente. Pero como las fechas pueden coincidir, y son fáciles de meter en el saco como "los malos de la película", pues se hace. Es la conclusión más rápida a la que se llega, al margen de motivos por los que surgen las teoría conspiranoicas etc. Y si no, que me digan cual es exactamente el decreto universal que promulgó Goebbels, porque ignoraba que como ministro de propaganda y Gauletier de Berlin tuviera el poder de decretar cosas universales. Sin embargo, las conferencias y demás cuestiones  que he explicado parece que están razonablemente claras. Hubo en su día un error (7) con las fechas en una publicación, pero que ya se ha identificado y corregido.
  • Históricamente no ha habido ninguna afinación correcta. Es verdad que hubo diferentes ideas, como con otras cuestiones (antes era meridiano de París en lugar de Greenwich la referencia náutica etc), y cuando se adopta una afinación es porque era la más fácil de definir. 
  • Cada músico afina como quiere, tal y como he podido comprobar en mi experiencia. Y si se interpreta música barroca con instrumentos originales y cuerdas según la época -se hace, si- entonces afinan más bajo el LA (=415Hz, por cierto), para que no se les rompa la cuerda MI a los violines. Eso ya lo hemos visto en el recorrido histórico, y sabemos el por qué. No hay ningún misterio. La explicación es simple: materiales endebles de la época.
  • En el consenso de la afinación no hubo nada extraño, salvo una oposición de los franceses, que fueron los pioneros, y querían mantener la afinación que ellos manejaban. Pero... americanos e ingleses tuvieron más peso.Y los problemas que comentan de reproducir la frecuencia etc. no son nada extraños, ni parecen responder a intereses ocultos.
  • Por último, las molestias que se pueden experimentar cuando se cambia la afinación las sufren los señores que tienen oído absoluto, y además hacen uso de él constantemente. He oído música en 432Hz, y me da la sensación de oscura, y de que invariablemente se quedan bajos y no afinan. Ni una nota. Eso si, las desafinan todas exactamente igual, lo que da sentido a la pieza, y hace que suene bien. Está todo perfectamente desafinado. Lo mismo me pasa en un concierto de música barroca, pero claro, allí sé que es porque si no nos quedamos sin cuerdas.



(1) Un post muy bueno es éste, francamente divertido, y recopila algunas curiosidades sobre la afinación.

(2) Explicación sencilla:
http://padronel.net/2011/11/13/cur-la-importancia-de-la-msica-a-432hz/
Explicaciones más detalladas, aunque parezcan iguales que la sencilla, sólo que con dibujitos añadidos:
http://padronel.net/2011/11/13/cur-la-importancia-de-la-msica-a-432hz/
http://www.narom.org/432%20a%20440%20Hz.html

(3) Definir la música llevaría mucho trabajo, y no hay consenso, pero creo que todos estamos de acuerdo en que son sonidos ordenados por el hombre.

(4) Si quieren jugar, hay aplicaciones que permiten instalar un decibelímetro en el móvil, y medir la intensidad de los sonidos. Es muy inexacto, pero verán que por la noche, con todo cerrado y sin ruidos aparentes, el móvil nos da una intensidad de sonidos en decibelios entre 30-35... No estamos nunca en silencio.

(5) Actualmente el consenso en cualquier medida etc se fija a través de un organismo que es la Organización internacional de Normalización, o ISO. Se puede visitar su web para entender más cosas, aunque está en inglés y francés.

(6) Los sistemas de afinación (vamos a identificarlos con temperamento, que sería bastante correcto musicalmente hablando) han ido evolucionando, puesto que Pitágoras dejaba unos errores que daban lugar a sonidos muy desagradables, como la llamada quinta del lobo. Del temperamento de Pitágoras se pasó al temperado, y luego a otros muchos como meostónico, igual etc. Importante recordar que si seguimos casi siempre hablando de Pitágoras como referencia es porque el temperado no apareció hasta Bach... En 1722 escribió su libro de ejercicios para el clave bien temperado... O sea, que la teoría de Pitágoras estuvo plenamente vigente entre el VI a. C. y el XVIII d. C. Importante recordarlo.

(7) Ver el siguiente artículo: http://www.wam.hr/sadrzaj/us/Cavanagh_440Hz.pdf

miércoles, 12 de marzo de 2014

¿QUÉ HACE -BASICAMENTE- UN ARQUEÓLOGO?



Ignoro el autor de este dibujo. Lo he visto en Facebook. Si lo ve, agradecería que me diera su nombre para poder ponerlo.


La viñeta de arriba nos indica muy resumidamente qué es lo que hace un arqueólogo, pero vamos a verlo desde otra perspectiva, para que podamos entenderlo mejor.

1. Un ejercicio de imaginación:

Vamos a hacer un ejercicio muy simple de ciencia-ficción. Igual que en la viñeta. Imagínense que la tierra se va al carajo, y sólo sobreviven unos pocos humanos. Vuelven a montar otra vez unas civilizaciones, para lo cual tardan unos 5 siglos... Y, en estas nuevas civilizaciones, tenemos arqueólogos. Los arqueólogos del futuro excavan sin conocer prácticamente nada de nuestra civilización. No hablan nuestro idioma con corrección, incluso ¡puede que ni lo entiendan! Los registros informáticos y mucha literatura se han perdido, y francamente, los pobres van reconstruyendo con lo que se encuentran. Y se encuentran con el cementerio local de su pueblo. Empiece a pensar cómo es el cementerio, si hay panteones llamativos (por aquí hay uno que tiene hasta una pirámide y una esfinge), nichos y fosa común. Las indicaciones escritas, convencionalismos que todos tenemos asumidos... Para nosotros, un cementerio o un edificio de nuestra época es un libro abierto. Sabemos por qué llevamos flores, qué festividad es la de Todos los Santos, significados de las inscripciones y carteles... Para el arqueólogo del futuro, que no conserva casi nada, es todo un misterio. Así que tiene que observar fotos, textos, pinturas etc. para hacerse una idea. Si no, podría llegar a conclusiones un tanto idiotas. 
Por ejemplo, que había una civilización extinguida de egipcios aquí, cuyo último representante-faraón se hizo construir una pirámide con esfinge en el cementerio local. O en mi caso, que había viajado en el Enterprise al espacio exterior porque llevo un adorno de Star Trek cuando me entierren. De risa, ¿verdad? ¡Estos señores creen que yo he viajado al espacio exterior! 
Sigan pensando... Carteles caídos que pasan a señalizar en vez de la salida del cementerio el inframundo, concepto abstracto que era tabú mencionarlo y del que sólo se conservan esas marcas en forma de extraños carteles verdes con el texto EXIT... La cruz sobre la tumba como símbolo de "pringao social", porque la casta dominante se hacían panteones sin cruces... con pirámides, pero de vez en cuando salía una cruz, para señalar que eran de la misma tribu...
Divertido, ¿no? ¿Cuanto durarían los malentendidos? Poco. EXIT sale en cualquier edificio público, y no todos los carteles estarán en el suelo. Unas cuantas excavaciones más, y misterio resuelto. Lo mismo con mi afición a la serie Star Trek; no soy la única, y enseguida darían con una interpretación bastante acertada. Lo mismo con las tumbas con cruz y la de pirámide...

Bien, esto es lo que hace un arqueólogo. Recoge datos, los interpreta, y sigue buscando datos para ver si su interpretación es correcta o es un disparate. Ya lo dijo Sherlock Homes: "Cuando todo aquello que es imposible ha sido eliminado, lo que queda, por muy improbable que parezca, es la verdad."


Nos alimentamos de datos. Cada excavación nos da más material para verificar si nuestras hipótesis con correctas o no. Y cada nuevo dato que aparece, sirve para confirmar o refutar una teoría. Es decir, sigo con los torpes arqueólogos del futuro... Han encontrado el cementerio local de su pueblo. Vale, lo llaman necrópolis, que significa "ciudad de muertos". Hasta ahí, correcto. Es a donde llevamos los difuntos. En base al nº de enterramientos y huesos, llegan a pensar que en su pueblo hay x habitantes, y que para nosotros lo más importante era enterrarlos en nichos, que es lo más común. Y de esto, deducen que las poblaciones tenía alrededor de x habitantes, que hacíamos estructuras en forma de cajas rectangulares para meter a los difuntos y que para nosotros con poner una placa con el nombre nos bastaba.

2. ¿Qué fallos hay en esta interpretación? 

Hombre, el primero es obvio, no sólo enterramos, también incineramos. El cálculo de población puede ser muy erróneo según el nº de personas que son incineradas y no están en el cementerio. 
Vamos a por otro fallo; el nicho puede que sea una forma de enterrar, pero hay muchas personas que hacen-tienen-heredan panteones... Los cementerios locales pequeños no suelen tener maravillas, pero en cuanto excavasen cualquier otro cementerio, la idea se les cae. Y no descartemos osarios etc. No hay un modelo de cementerio, hay muchos, en función de la población, necesidades, usos y costumbres...
Más fallos... Aunque para algunos poner una placa es bastante, hay  muchas personas que van a llevar flores cada cierto tiempo. Y tenemos una festividad, Todos los Santos, que es cuando el cementerio se llena de flores... O tienen acceso a documentos, o eso se les puede escapar.
Lo de EXIT y el inframundo... supongo que no necesita mucha aclaración.
¿Vamos entendiendo cómo funciona la arqueología? Yo encuentro un conjunto de cosas, y busco una explicación para ellas. Esta explicación no sólo no es definitiva, sino que depende de nuevos hallazgos. Eso sólo con restos materiales...

3. Textos, imágenes y otras hierbas arqueológicas:

Nuestros arqueólogos del futuro han tenido suerte, y además de poder excavar el cementerio local se han encontrado un tanatorio con el registro de difuntos. Y han sido capaces de leer los documentos y ver algunas imágenes. Ahora, con estos datos, hacen correcciones: ya saben que incineramos, y que mucha gente se lleva las cenizas a no se sabe dónde. Deducen que a su casa, por temas familiares. Y establecen un nuevo cálculo de población con más datos... Pero, pasa algo raro. En el registro tienen x+y muertos; /x/ los de las tumbas, e /y/ los incinerados. Pero en el cementerio hay personas que no salen en el registro... ¿Será que se han perdido datos?
La respuesta más rápida es que hay otro tanatorio, y que para saber realmente los difuntos tienen que ir al registro del ayuntamiento. Claro. Y lo digo yo que vivo en esta cultura, la conozco, y sé dónde buscar información. Pero nuestros pobres arqueólogos del futuro puede que no sepan dónde buscar estos datos; y que además, cuando consigan acceder al ayuntamiento (cosa difícil hoy día, no quiero imaginarlo dentro de 5 siglos), estos registros se hayan perdido. A saber qué pueden decir... Pero de nuevo tendrán problemas con las conclusiones.
Vamos a por las imágenes... Todo de ámbito cristiano. Cruces por todos los lados etc. O bien aséptico total, sin nada salvo alguna florecilla. Resultado; el 100% de la población adoraba la cruz como símbolo de creencias en el más allá.  Los que tenían dinero, ponían símbolos; y los que no, se quedaban con lo más espartano. ¡Vaya patinazo de interpretación! Pero claro, es que es muy raro ver en un tanatorio y/o cementerio una figura de Shiva, Buda etc. Al menos aquí. Por no hablar de los que no creen en nada pero se quedan con el símbolo después de muertos. ¿Las imágenes mienten? A estas alturas, nuestros descendientes lo tienen claro: ¿Por qué estos tordos de aquella civilización no anotaban estas cosas?
Podría hacer el análisis más divertido todavía, y que recuperasen el video de Thriller de Michael Jackson, o que accedieran a los registros de la parroquia, en vez de a los del tanatorio y tuvieran que conjugar Thriller con la muerte del Conde Orgaz... Pero creo que podemos dejar estas elucubraciones para que cada uno se haga sus risas imaginando las conclusiones sobre las creencias en el más allá a través del video citado.

4. En resumen:

Vamos a resumir un poco todo lo que hemos podido ver...
  • El arqueólogo se nutre de datos, que extrae del yacimiento. También usa textos, inscripciones, imágenes y cualquier otro material que haya para ayudarse.
  • Interpretar exige un ejercicio de imaginación; pero también de sensatez. Un buen profesional no dice lo primero que se le pasa por la cabeza: analiza, piensa, busca alternativas y otras posibles explicaciones...
  • Todo esto se revisa a cada nueva aparición. La arqueología no es un campo cerrado. Un nuevo yacimiento puede darnos nuevas pistas sobre fechas, estructuras, creencias... Un nuevo documento puede aportarnos datos para interpretar el yacimiento mejor. Cada granito que añadimos, nos permite una visión más nítida de nuestro pasado.




sábado, 1 de marzo de 2014

EL MILAGRO DE SAN JENARO: HISTORIA, HECHOS, MITOS... Y CÓMO ABORDARLO

Dentro de la historia hay un apartado que es especialmente sangrante en falsificaciones y mitos; la parte de los milagros y reliquias de la iglesia. Estos fenómenos pueden y deben ser observados históricamente, y ser analizados críticamente, dejando de lado las creencias personales -y me da igual que uno sea creyente que ateo, sus prejuicios no me sirven; sólo los hechos y las demostraciones. Lo demás, es personal y quedará reducido a mera especulación.

¿En qué consiste el milagro de San Jenaro?

El nombre se puede ver escrito tanto con /g/ como con /j/, pero recojo la grafía que yo he visto en libros sobre el tema. Puede que sea influencia del francés...

Busto de San Jenaro:

Se supone que San Jenaro fue uno de los últimos mártires allá por el 305 en las últimas persecuciones a cristianos. Intentaron que renegase de la fe sin éxito, intentaron quemarlo vivo, sin éxito. Intentaron que los leones se lo comieran, sin éxito. Y entonces lo decapitaron. Alguien en aquel tiempo debió recoger la sangre y guardarla en un par de vasitos de cristal, o ampollas. La primera mención que tenemos de dichas ampollas es de 1389, y luego a partir de esta fecha se ha seguido el rastro de dichas ampollas sin problemas ya en la zona de Nápoles. (1) Bien, la cuestión es como sigue: tres veces al año se sacan las ampollas que tienen teóricamente la sangre del santo, y si se quedan en estado sólido es sinónimo de desgracias. En cambio, si se licúan, es sinónimo de que que todo va a ir bien. Las fechas anuales del supuesto milagro son:
  • 19 de septiembre, por la muerte del propio Santo: Las ampollas son expuestas durante 7 días, y los fieles pueden besarlas.
  • Sábado anterior al primero domingo de mayo: Las ampollas son llevadas en procesión desde la Catedral de Nápoles hasta la Basílica de Santa Clara.
  • 16 de diciembre, como patrono de la ciudad: Por lo que tengo entendido, se sacan y si están líquidas, perfecto. Si no, mal augurio, aunque de las tres fechas es la menos importante.
Otros milagros similares:

Yo no he visto ni éste ni ningún otro caso similar, porque cuando he ido a los sitios no me ha coincidido en las festividades, pero creo que es interesante hacer constar para el que quiera, que no es necesario irse hasta Nápoles para ver el milagro. En España tenemos a San Pantaleón, en el Real Monasterio de la Encarnación de Madrid, con su ampolla de sangre, que se licúa el 27 de julio.

Las dos ampollas de San Jenaro está recogidas en esta estructura que parece un cetro, sujetadas por el Cardenal Crescenzio Sepe:


Otros casos similares que he leído (2) y que cito por curiosidad pero sin ánimo científico -es decir, no he buscado nada de información sobre ellos- son los de San Chárbel Makhlouf (algo diferente, la sangre debe emanar de la tumba, pero aparece recogido como idéntico fenómeno), San Juan Bautista, San Esteban el Protomártir, San Pantaleón, Santa Patricia, San Nicolás de Tolentino y San Luis Gonzaga. Al parecer, todos estos han conservado su sangre en la zona de Nápoles, excepto San Chárbel. Y a todos se les licúa en determinadas fiestas.

El milagro cazado:

El supuesto milagro de la sangre de San Jenaro fue desmontado de una forma bastante divertida... 

En 1799 el general Championnet se apodera de Nápoles con el ejército francés -invasión napoleónica, para situarnos en el contexto histórico. El clero ya había usado anteriormente el milagro de San Jenaro como forma de protesta política. 

General Championnet:


Total, que el bueno de Championnet se entera de que van a usarlo en su contra por ser invasor etc., y va a la Catedral a ver la ceremonia de la ampolla. La sacan, y está sólida. La gente empieza a abuchear... Pero Championnet sabía mucha teología parda, y mandó a un ayudante de campo a ver al sacristán diciéndole lo que sigue: "Vaya a ver al sacerdote oficiante y dígale de mi parte que si la sangre no está en ebullición en cinco minutos, hago bombardear Nápoles." (3)
En un tiempo que se puede calcular entre 5 y 10 segundos a tenor de lo que se dice, la sangre estaba burbujeando como loca...

Estudios científicos sobre el caso y diversas explicaciones:

Hasta aquí, la exposición de los hechos, que se puede considerar un tanto sesgada por mi parte desde el momento en que considero que Championnet desmonta el milagro. Todo lo anterior ha sido una recopilación de datos. ¿Cómo se debe abordar este caso desde un punto de vista científico, para saber si estamos ante un milagro o un buen truco para atraer a los fieles? Vamos a seguir las indicaciones que di en otra entrada anterior sobre qué hacer ante noticias y hechos históricos, añadiendo algunos elementos que no salían porque era una forma muy general de abordar la historia.

1. Antes de nada, saber qué nos preguntamos: Como se verá en los siguientes puntos, la pregunta que nos hacemos es fundamental. En este caso, la duda que yo plantearía sería si el milagro, que está ampliamente documentado, puede obedecer a otras causas que no sean sobrenaturales; y si puedo demostrarlo. También me preguntaría por la datación de la sustancia interior, para saber si es de la época que tiene que ser.

2. ¿Donde leo esto?: A lo largo de la explicación he dejado diferentes webs y libros que documentan el fenómeno, al menos desde 1389. Es decir, no pongo en duda el fenómeno de licuefacción del líquido contenido en las ampollas, porque se puede ver hoy día, está documentado en numerosas partes, y aparece recogido en literatura de todo tipo; desde cualquier periódico hasta revistas serias como Nature (4). El hecho como tal está probado. El hecho de que una sustancia pasa de estado sólido a líquido en determinadas fechas; no que la sangre de San Jenaro haya sido recogida y conservada en estas ampollas, que es muy diferente. Nadie dice haber recogido la sangre, transportado etc. Sobre este punto, no tenemos documentación.

3. ¿Quien es el que afirma?: De nuevo nos encontramos con numerosas personas que afirman haber visto el fenómeno. Y hasta nosotros podemos observarlo yendo al sitio. Pero no tenemos constancia de quien fue el que recogió la sangre... Y de hecho, entre la muerte de San Jenaro (305) y la aparición de las ampollas (1389) han pasado 1084 años. No tenemos documentación que nos asegure de ninguna forma que lo que tenemos en las ampollas es la sangre de San Jenaro, o qué ha sucedido en esos 1084 años. Es decir, las fuentes que tenemos de información son solventes y más que suficientes, pero hay un periodo inmenso del que no hay datos ni personas que afirmen sobre el fenómeno.

4. ¿Cómo nos presentan la noticia y qué dicen los expertos en la materia?: En general, la abordan de forma correcta. Es decir, a no ser que se ande buscando una presentación sesgada de algún fanático, el tratamiento suele ser bastante razonable, sea cual sea la fuente que se consulte. La clave está en qué dicen los expertos en la materia. Aquí se debe señalar que hay discrepancias según la fuente que consultemos.
  1. Fuentes religiosas: Es un milagro, puesto que la ciencia no ha podido dar una explicación 100% convincente de cómo se puede hacer un líquido de semejantes características. A lo más que han llegado es a dar explicaciones parciales de cómo lo harían ellos, que tienen fallos, puesto que los líquidos fabricados pierden eficacia en el mejor de los casos a los 10 años, o bien hay casos documentados en los que la temperatura no influye en la licuefacción de la sustancia. (6)
  2. Periódicos y medios de comunicación: En general, se limitan a recoger el fenómeno como "el milagro de San Jenaro" y no ofrecen datos específicos ni críticos. Es como el Día de la Marmota: sale en la prensa, es un fenómeno mediático, pero a nadie parece interesarle lo que hay de verdad detrás de la entrañable (o no tanto) tradición. Aún así, al final se verá que algunos han aportado más datos de corte científico.
  3. Fuentes científicas: Afirman que es un montaje, bastante vulgar además. Las explicaciones que he visto sobre el fenómeno son dos:
                  a. Esperma de ballena con colorante (abreviando la composición). (5) Funciona con calor-frío.
                    b.  Uso de una sustancia tixotrópica. El que no sepa lo que es, puede consultar cualquier fuente mejor que mi explicación, pero básicamente -y para entendernos- son sustancias que reaccionan al movimiento. Me explico: es como la pintura. Si se deja en reposo y se abre el bote, tendremos "dos pinturas"; una muy líquida arriba y otra muy pastosa abajo. Hay que agitarla para que tenga ese punto líquido perfecto para aplicar (y el color exacto, claro, o nos dejamos los pigmentos en el fondo). (7) Obviamente, hay ejemplos mejores, pero para entender el concepto creo que es suficiente.
                  c. Al parecer, la sangre humana tiene esa propiedad sin necesidad de hacer nada complicado. A esta conclusión ha llegado Giuseppe Geraci, del departamento de Biología molecular de la Universidad Federico II. (8). Este último análisis se basa en otra ampolla "milagrosa" de similares características, en el que el investigador establece que es sangre. Además, él mismo fabricó una ampolla con su propia sangre, puesto que es una propiedad común. La afirmación final recogida en la noticia deja clara su opinión: "El verdadero milagro de San Jenaro es la fe que es capaz de suscitar. El afecto de los napolitanos por el patrón y su reliquia."

Pero aquí hay una cuestión de fondo que atañe a otra disciplina, y que las fuentes científicas resaltan, pero las religiosas no: es necesario un análisis químico para determinar exactamente la composición de la sustancia recogida en las ampollas, a lo que la Iglesia Católica se opone.
Efectivamente, los análisis que se han hecho hasta ahora de la sustancia contenida en las ampollas han sido espectrográficos, puesto que no les dejan sacar una mínima muestra de la sustancia para poder analizarla. En estos análisis se ha detectado hemoglobina humana en las ampollas, pero los análisis no han sido hechos de una forma convincente, y se ha criticado tanto el aparato empleado como la forma de realizar el análisis.

5. ¿La información deja el tema resuelto?: Desde la perspectiva científica, hace falta un análisis químico para terminar la polémica, aunque como se puede ver, parece bastante probable que sea sangre con algún componente químico. La prueba definitiva vendría de un laboratorio, prueba que les niegan. Desde la otra perspectiva, es una mera cuestión de fe que no requiere análisis químicos. Bueno, eso no es científico, aunque termine con el interrogante de raíz. 

6. Interdisciplinariedad: Añado este punto al análisis, puesto que, como se puede ver es fundamental. No hay duda alguna del fenómeno. La historia lo tiene ampliamente documentado. Lo podemos observar hoy día. La cuestión no es esa.  Como ya he comentado, es importante hacer las preguntas correctas, y la pregunta no es si se produce el fenómeno, sino cómo y por qué. La cuestión sería determinar si lo que contienen las ampollas es sangre humana 100% y si la propiedad que se les otorga es exclusiva a esta sangre, o común a cualquier sangre humana. Y ya que estamos, si se pudiera, datar la sustancia para saber su antigüedad.
¿Por qué? Porque el fenómeno como tal está documentado. Como historiador, ya he dicho que sí se produce y se puede observar, pero que hay una laguna de 1084 años sobre la cual no tenemos documentación, y es la que hace que ponga en duda su origen, tipo de sustancia etc. Aquí requiero la ayuda de químicos, que son los que van a tener la palabra definitiva.  De momento, por lo visto en pruebas y experimentos, parece que es algo bastante común, y que cualquiera puede hacer, con o sin sangre. Es decir, el supuesto milagro es replicable en un laboratorio -y hasta yo misma he visto la receta y podría hacerlo-, y lo que determinaría el sistema empleado es un vulgar análisis. Se han propuesto diferentes alternativas que explican el fenómeno, y hay una laguna temporal increíblemente grande. Como historiador -o como persona con cierta capacidad crítica-, necesito esta ayuda.

Conclusión:

Al final, en estas cosas el criterio a seguir es que si se niega un análisis de la sustancia, es porque realmente se sospecha/sabe que es un fraude. La cantidad necesaria es mínima, y no hay daños a nada, claro. Eso es importante matizarlo. Si se fuera a destruir la reliquia, sería obligado por parte de la iglesia negarse. Pero no es el caso.
Esto unido a las lagunas en la historia ya señaladas, el caso de Chanpionnet, y que seguro que se pueden señalar fallos en la efectividad protectora de las ampollas. Tan simple como mirar cuando se ha licuado y cuando no, y si ha habido correspondencia con desgracia o no. 
Todo esto no quita ningún encanto a la festividad, o a las celebraciones que se hagan, ni tampoco busca nada raro. Simplemente es una forma de entender que es necesario el pensamiento crítico, y que aunque incluso un fenómeno esté documentado, puede ser perfectamente una estafa. Para ello, hay que saber hacer las preguntas correctas, y no quedarse sólo con lo que nos dicen.

(1) http://it.wikipedia.org/wiki/San_Gennaro
(2) http://www.aciprensa.com/santos/santo.php?id=280
(3) BROCH, H. (1987): Los fenómenos paranormales. Una reflexión crítica. Grijalbo, Barcelona, p. 100
(4) Working bloody miracles, Nature, 13 septiembre de 1991. Pongo el enlace del CICAP, que es a lo que yo he podido tener acceso: http://www.cicap.org/new/articolo.php?id=100063
(5) BROCH, H. (1987): Los fenómenos paranormales. Una reflexión crítica. Grijalbo, Barcelona, p. 99. Sacado a su vez del Gran Diccionario Universal del s. XIX de Pierre Larousse
(6) http://www.aciprensa.com/santos/santo.php?id=280
(7) http://www.cicap.org/new/articolo.php?id=100063
(8) http://www.liberoquotidiano.it/news/343683/Sangue-nell-ampolla-di-San-Gennaro.html